6 de junio de 2018

Sanitas Residencial Almenara, centro libre de sujeciones

Corporativo
  • El centro logra la total eliminación del uso de sujeciones en el cuidado de mayores con demencia
  • Sanitas Mayores ha reducido el uso de sujeciones en toda su red a menos del 1%, frente a la media española que se sitúa el uso de sujeciones en torno al 12%
  • El 87% de los centros de la red de Sanitas Mayores ya ha sido acreditado como libre de sujeciones
  • En el marco del proyecto `Por una residencia sin sujeciones” se han impartido más de 60.000 horas de formación sobre demencia y alzhéimer a 7.395 profesionales de la compañía

 

La Confederación Española de Organizaciones de Mayores, CEOMA, ha acreditado como centro ‘libres de sujeciones’ a la residencia Sanitas Residencial Almenara, en Colmenar del Arroyo, en Madrid. Este centro ha eliminado por completo el uso de sujeciones en el cuidado de sus mayores.

La acreditación externa realizada por CEOMA es un valor diferencial clave dentro del proyecto ‘Por una residencia sin sujeciones’ con el que Sanitas Mayores ha sido pionera en la implantación de un modelo sin sujeciones. En palabras del presidente de CEOMA, Ángel S. Quesada, «CEOMA ha sido pionera en España en la eliminación de las sujeciones desde hace quince años con el programa ‘Desatar al Anciano y al Enfermo de Alzheimer’. La eliminación de sujeciones físicas y farmacológicas, se consiguen no solo por una buena cualificación y competencia de los profesionales sino por una especial sensibilización y formación de los mismos».

Por su parte, Ana Belén Barbero, alcaldesa de Colmenar del Arroyo, ha mostrado la satisfacción del modelo de cuidado por el que apuesta Sanitas Residencial Almenara. “Con esta acreditación se demuestra que otro modelo de cuidados es posible. Desde el Ayuntamiento ofrecemos nuestro total apoyo a los profesionales de la residencia, que con su esfuerzo, hacen que la calidad de vida de nuestros mayores sea mejor cada día”.

El 87% de los centros de Sanitas Mayores, certificados como centros libres de sujeciones

El uso de sujeciones en Sanitas Mayores se ha reducido a un 1% frente al 12% en torno al cual se sitúa la media española. En la actualidad, el 87% de la red de Sanitas Mayores ya ha sido acreditada por CEOMA como centros libres de sujeciones.

Hasta hace poco, el uso de sujeciones, tanto físicas como farmacológicas, ha estado normalizado en la atención de determinadas patologías, en especial para evitar el riesgo de caídas. Sin embargo, se ha demostrado que son mayores los perjuicios que los beneficios que se desprenden de su uso. Eliminar las sujeciones no incrementa el riesgo de lesiones por caídas y, sin embargo, mejora la situación médica y psicológica, esta es la principal conclusión que se extrae de la investigación  “Reducción de Sujeciones Físicas en Residencias” realizada por la Fundación Maria Wolff y Sanitas Mayores entre 7.657 mayores de sus residencias.

“Se da un ligero incremento no significativo de las caídas tras eliminar las sujeciones, pero las caídas con consecuencias disminuyen. Los beneficios, sin embargo, son múltiples. Se da una menor incidencia de osteoporosis y un mejor mantenimiento de la masa muscular. Además, los residentes manifiestan menos dolores y molestias y están más contentos y tranquilos, lo que supone una mejora en el ambiente general de los centros”, comenta el doctor Pedro Cano, director de Innovación Médica de Sanitas Mayores.

Más de 60.000 horas de formación, la clave del cuidado sin sujeciones de Sanitas Mayores

El doctor Cano enfatiza el papel de la formación en el proceso. “Nos hemos volcado en el proyecto con la convicción de que eliminar los métodos de sujeción es la única vía de ofrecer la mejor atención posible. Para ello hemos hecho un gran esfuerzo en la formación de nuestros profesionales y en el seguimiento personalizado de cada residente. Un proceso donde la implicación del equipo y de las familias ha sido clave”.  Para conseguir los objetivos del programa de atención a personas con demencia de Sanitas Mayores, se han impartido más de 60.000 horas de formación en este campo a 7.395 profesionales.

El modelo de gestión de Sanitas Mayores se caracteriza por una atención especializada y personalizada, basada en el conocimiento de las circunstancias individuales de cada residente. En esta línea, los centros acreditados ofrecen cuidados especializados para personas con alzhéimer u otras demencias, con el aval que supone la experiencia con más de 3.000 personas con esta dolencia que atiende anualmente Sanitas Mayores en España.

Con el objetivo de aportar calidad de vida y bienestar así como de favorecer el mayor grado de autonomía durante el mayor tiempo posible, el fomento de un envejecimiento saludable y feliz será otro de los ejes asistenciales. En este punto, destaca el amplio programa de actividades tanto terapéuticas como de ocio, diseñadas por los especialistas.

12 de mayo de 2017

Adoptar hábitos de vida saludable, evitar el aislamiento y pensar en positivo, principales claves para ayudar a cuidadores y familiares

Comunidad
  • Cerca del 50% de los familiares que desempeñan el papel del cuidador padecen el denominado “síndrome del cuidador”
  • Las familias precisan de información, comprensión y apoyo para afrontar el cuidado de la demencia

Practicar el pensamiento positivo, adoptar hábitos de vida saludable y evitar el aislamiento social son tres actitudes clave para asumir la responsabilidad de cuidar a un familiar con demencia. Así se puso de manifiesto en el Encuentro con familias que ha tenido lugar en Sanitas Residencial Tarragona con el objetivo de compartir experiencias y proporcionar recursos a los cuidadores y familiares de personas con Alzheimer y otras demencias.

La demencia también afecta al entorno del paciente, en el que se comprenden el cuidador y los familiares. La familia participa de la enfermedad en sus diferentes fases de evolución, y para por este proceso que predispone a sufrir diversas alteraciones psicológicas, físicas y sociales, sobre todo, en la persona que asume el rol de “cuidador principal”. “El cuidado contínuo del paciente implica una serie de efectos colaterales comunes en los familiares y cuidadores, entre los que destacan el malestar general, las alteraciones del sueño, cefaleas, anemia, alteraciones en huesos y músculos, estrés, ansiedad, tristeza, sentimiento de culpa o aislamiento social”, ha detallado Bea Borrellas, psicóloga de Sanitas Residencial Tarragona.

Cerca del 50% de los familiares que desempeñan el papel del cuidador padecen estos efectos, denominados como “síndrome del cuidador”, que se pueden dar en menor o mayor grado, según datos de la Encuesta Sanitas 2015 sobre familiares que cuidan de personas con Alzheimer en España. Para evitar estos problemas las recomendaciones empiezan por “identificar las fortalezas personales, aceptar las limitaciones de cada persona y en especial complementar el cuidado del paciente con el cuidado propio mediante el descanso, una correcta alimentación, mantener las relaciones sociales y desconectar de vez en cuando”, ha explicado la psicóloga Bea Borrellas.

Desde el punto de vista emocional, “es normal que los cuidadores se vean desbordados y experimenten sentimientos de tristeza, soledad o culpabilidad. El estrés emocional es comprensible. Por eso, aunque es aplicable a todas las esferas de la vida, en este ámbito es aún más necesario fomentar y practicar una actitud positiva, una estrategia del optimismo que ayude a afrontar mejor todo el proceso de la enfermedad y a dosificar la energía”, explicó el doctor Iñaki Ferrando, director Médico de Sanitas.

Ciclo de Conferencias

Tarragona se suma al ciclo anual de conferencias “Encuentros con Familias” promovido por Sanitas Mayores dentro del programa “Compañeros en los cuidados” con el que buscan proporcionar a las familias y cuidadores comprensión, apoyo y solidaridad para afrontar la responsabilidad del cuidado del Alzheimer u otras demencias.

Los encuentros previstos para 2017 contarán con la presencia del doctor Iñaki Ferrando, director Médico de Sanitas, encargado de dar las claves del pensamiento positivo con su ponencia “Afrontar cada día con psicología positiva”; y del personal médico de Sanitas Mayores, que mostrarán a los asistentes los principales recursos del portal “Cuidar Bien”, la primera web centrada en los cuidadores de personas con demencia, impulsada por la Fundación Sanitas.

La programación de este año incluye 10 encuentros:

  • Hospital de Manises (Manises, Valencia) – 25 de enero (celebrado)
  • Sanitas Residencial La Seu (Valencia) – 26 de enero (celebrado)
  • Sanitas Residencial Mas Camarena (Bétera, Valencia) – 26 de enero (celebrado)
  • Sanitas Residencial La Moraleja (Madrid) – 7 de marzo (celebrado)
  • Sanitas Residencial Illerda (Lleida) – 4 de abril (celebrado)
  • Sanitas Residencial Henares (Alcalá de Henares) – 19 de abril (celebrado)
  • Sanitas Residencial Taragona (Tarragona) – 9 de mayo (celebrado)
  • Sanitas Residencial La Florida (Madrid) – 23 de mayo
  • Sanitas Residencial Getafe (Getafe) – 14 de junio
  • Sanitas Residencial Henares (Alcalá de Henares) – 20 de septiembre
20 de abril de 2017

Un pensamiento positivo, hábitos de vida saludables y relaciones sociales, claves para ayudar a cuidadores y familiares

Comunidad
  • Cerca del 50% de los familiares que desempeñan el papel del cuidador padecen el denominado “síndrome del cuidador”
  • Las familias precisan de información, comprensión y apoyo para afrontar el cuidado de la demencia

Practicar el pensamiento positivo, adoptar hábitos de vida saludable y evitar el aislamiento social son tres actitudes clave para asumir la responsabilidad de cuidar a un familiar con demencia. Así se puso de manifiesto en el Encuentro con familias que ha tenido lugar en Sanitas Residencial Illerda con el objetivo de compartir experiencias y proporcionar recursos a los cuidadores y familiares de personas con Alzheimer y otras demencias.

La demencia también afecta al entorno del paciente, en el que se comprenden el cuidador y los familiares. La familia participa de la enfermedad en sus diferentes fases de evolución, y para por este proceso que predispone a sufrir diversas alteraciones psicológicas, físicas y sociales, sobre todo, en la persona que asume el rol de “cuidador principal”. “El cuidado contínuo del paciente implica una serie de efectos colaterales comunes en los familiares y cuidadores, entre los que destacan el malestar general, las alteraciones del sueño, cefaleas, anemia, alteraciones en huesos y músculos, estrés, ansiedad, tristeza, sentimiento de culpa o aislamiento social”, ha detallado Laia Andreu, psicóloga de Sanitas Residencial Illerda.

Cerca del 50% de los familiares que desempeñan el papel del cuidador padecen estos efectos, denominados como “síndrome del cuidador”, que se pueden dar en menor o mayor grado, según datos de la Encuesta Sanitas 2015 sobre familiares que cuidan de personas con Alzheimer en España. Para evitar estos problemas las recomendaciones empiezan por “identificar las fortalezas personales, aceptar las limitaciones de cada persona y en especial complementar el cuidado del paciente con el cuidado propio mediante el descanso, una correcta alimentación, mantener las relaciones sociales y desconectar de vez en cuando”, ha explicado la psicóloga Laia Andreu.

Desde el punto de vista emocional, “es normal que los cuidadores se vean desbordados y experimenten sentimientos de tristeza, soledad o culpabilidad. El estrés emocional es comprensible. Por eso, aunque es aplicable a todas las esferas de la vida, en este ámbito es aún más necesario fomentar y practicar una actitud positiva, una estrategia del optimismo que ayude a afrontar mejor todo el proceso de la enfermedad y a dosificar la energía”, explicó el doctor Iñaki Ferrando, director Médico de Sanitas.

Ciclo de Conferencias

Illerda se suma al ciclo anual de conferencias “Encuentros con Familias” promovido por Sanitas Mayores dentro del programa “Compañeros en los cuidados” con el que buscan proporcionar a las familias y cuidadores comprensión, apoyo y solidaridad para afrontar la responsabilidad del cuidado del Alzheimer u otras demencias.

Los encuentros previstos para 2017 contarán con la presencia del doctor Iñaki Ferrando, director Médico de Sanitas, encargado de dar las claves del pensamiento positivo con su ponencia “Afrontar cada día con psicología positiva”; y del personal médico de Sanitas Mayores, que mostrarán a los asistentes los principales recursos del portal “Cuidar Bien”, la primera web centrada en los cuidadores de personas con demencia, impulsada por la Fundación Sanitas.

La programación de este año incluye 10 encuentros:

  • Hospital de Manises (Manises, Valencia) – 25 de enero (celebrado)
  • Sanitas Residencial La Seu (Valencia) – 26 de enero (celebrado)
  • Sanitas Residencial Mas Camarena (Bétera, Valencia) – 26 de enero (celebrado)
  • Sanitas Residencial La Moraleja (Madrid) – 7 de marzo (celebrado)
  • Sanitas Residencial Illerda (Lleida) – 4 de abril (celebrado)
  • Sanitas Residencial Henares (Alcalá de Henares) – 19 de abril (celebrado)
  • Sanitas Residencial Taragona (Tarragona) – 9 de mayo
  • Sanitas Residencial La Florida (Madrid) – 23 de mayo
  • Sanitas Residencial Getafe (Getafe) – 14 de junio
  • Sanitas Residencial Henares (Alcalá de Henares) – 20 de septiembre
9 de marzo de 2017

Sanitas Residencial Valladolid, centro libre de sujeciones físicas

Corporativo
  • El centro logra la total eliminación del uso de sujeciones en el cuidado de mayores con demencia
  • En solo cuatro años Sanitas Mayores ha acreditado el 77% de su red como libre de sujeciones
  • Sanitas Mayores ha reducido el uso de sujeciones a un 0,9% frente a la media española que se sitúa en torno al 12%

El centro residencial Sanitas Valladolid ha sido acreditado como centro libre de sujeciones por la Confederación Española de Organizaciones de Mayores, CEOMA. Este reconocimiento acredita que la residencia de Sanitas Mayores ha eliminado por completo el uso de sujeciones en el cuidado de sus mayores.

La certificación se enmarca dentro el proyecto ‘Por una residencia sin sujeciones’ con el que Sanitas Mayores ha sido pionera en la implantación de un modelo sin sujeciones. Hasta hace poco, el uso de sujeciones, tanto físicas como farmacológicas,  ha estado normalizado en la atención de determinadas patologías, en especial para evitar el riesgo de caídas. Sin embargo, se ha demostrado que son mayores los perjuicios que los beneficios que se desprenden de su uso.

Eliminar las sujeciones no incrementa el riesgo de lesiones por caídas y, sin embargo, mejora la situación médica y psicológica, esta es la principal conclusión que se extrae de la reciente investigación  “Reducción de Sujeciones Físicas en Residencias” realizada por la Fundación Maria Wolff y Sanitas Mayores entre 7.657 mayores de sus residencias. “Se da un ligero incremento no significativo de las caídas tras eliminar las sujeciones, pero las caídas con consecuencias disminuyen”, comenta el doctor David Curto, jefe de Gestión Asistencial de Sanitas Mayores.

Los beneficios de cuidar sin sujeciones son múltiples, según el doctor Curto “se da una menor incidencia de osteoporosis y un mejor mantenimiento de la masa muscular. Además, los residentes manifiestan menos dolores y molestias y están más contentos y tranquilos, lo que supone una mejora en el ambiente general de los centros”.

Valladolid se suma a la eliminación de sujeciones

El centro Residencial Sanitas Valladolid se suma ahora al proyecto de la compañía que en solo cuatro años ha logrado certificar el 77% de sus 40 centros como “Libre de sujeciones” y  reducir a un 0,9% su uso frente a la media española que se sitúa en torno al 12%, según la Asociación de Empresas de Servicios para la Dependencia (AESTE), que engloba a los principales operadores del sector residencial.

“Nos hemos volcado en el proyecto con la convicción de que eliminar los métodos de sujeción es la única vía de ofrecer la mejor atención posible. Para ello hemos hecho un gran esfuerzo en la formación de nuestros profesionales y en el seguimiento personalizado de cada residente. Un proceso donde la implicación del equipo y de las familias ha sido clave”, valora Paloma García-Marina del Olmo, directora de Sanitas Residencial Valladolid.

El programa, diseñado por la Fundación Maria Wolff y Sanitas Mayores, conlleva la formación de todo el personal sanitario aportándole conocimientos sobre demencias, disfagias, evitación y manejo de conductas desafiantes, prescripción de calidad de psicofármacos, programas de prevención de caídas y formación jurídica, entre otros muchos aspectos.

Modelo de cuidado centrado en la persona, cuidado sin sujeciones

El modelo de gestión de Sanitas Mayores se caracteriza por una atención especializada y personalizada, basada en el conocimiento de las circunstancias individuales de cada residente. En esta línea, el centro residencial Valladolid ofrece cuidados especializados para personas con alzhéimer u otras demencias, con el aval que supone la experiencia con más de 3.000 personas con esta dolencia que atiende Sanitas Mayores en España.

Con el objetivo de aportar calidad de vida y bienestar así como de favorecer el mayor grado de autonomía durante el mayor tiempo posible, el fomento de un envejecimiento saludable y feliz será otro de los ejes asistenciales. En este punto, destaca el amplio programa de actividades tanto terapéuticas como de ocio, diseñadas por los especialistas. En total, la residencia cuenta con un equipo multidisciplinar de médicos, psicólogos, enfermeros, fisioterapeutas y terapeutas ocupacionales.

2 de diciembre de 2015

Las caídas son una de las principales causas de discapacidad en personas mayores

Salud y bienestar
  • Las caídas afectan a un 30% de los mayores de 65 años y a un 50% de los mayores de 80 años
  • Una de cada 10 caídas genera lesiones graves, como fracturas de cadera
  • Con un grado de recurrencia del 50%, el miedo a volver a caerse puede convertirse en el inicio de una discapacidad
  • Actividad física, ajuste de medicación y eliminación de riesgos en el hogar, principales factores preventivos

Las caídas son una de las causas más frecuentes de discapacidad y fragilidad en las personas mayores. Con motivo del Día Internacional de las Personas con Discapacidad, Sanitas Residencial recuerda que su prevención requiere de una evaluación e intervención personalizadas que aborde aspectos como la actividad física, el ajuste de medicación o la revisión de los riesgos en el hogar.

La Organización Mundial de Salud, OMS, define la caída como cualquier acontecimiento involuntario que hace perder el equilibrio y dar con el cuerpo en tierra u otra superficie firme que lo detenga. Se trata de uno de los problemas más frecuentes en la población mayor. Según estudios recientes del Sistema Nacional de Salud, alrededor de un 30% de los mayores de 65 años y un 50% de los mayores de 80 años que viven en comunidad se cae al menos una vez al año. La mitad tiene caídas recurrentes, se vuelve a caer en el mismo año. La caída es, por tanto, un factor de riesgo para sufrir nuevas caídas. “Incluso puede provocar el denominado síndrome del temor a caerse que supone el inicio de la discapacidad en el anciano” advierte el doctor David Curto, jefe de Gestión Asistencial de Sanitas Residencial.

“La causas son múltiples, muchas veces no existe una causa evidente. Por eso hay que intentar minimizar las causas detectables externas como calzado inadecuado, muebles, alfombras o suelos resbaladizos y las causas intrínsecas de la persona como medicaciones o patologías crónicas” explica el doctor David Curto. Junto a la alta prevalencia, hay que tener en cuenta las consecuencias de este problema. Según datos del SNS, más de un 70% tiene consecuencias clínicas como fracturas, heridas o esguinces y más de la mitad presenta secuelas posteriormente. Así el 50% de las personas que sufren una fractura por una caída no recupera el nivel funcional previo. Además una de cada diez caídas genera lesiones graves que incluyen la fractura de cadera.

Prevención personalizada
En general, en población mayor de 65 años con un estado saludable, mantener una actividad física habitual y una alimentación equilibrada son dos hábitos que protegen de sufrir caídas. Para el caso de los mayores de 65 años con un estado de salud frágil, se requiere un abordaje personalizado con acciones concretas para cada caso.

“No existe un método único para prevenir las caídas, Es muy importante un enfoque centrado en la persona porque cada persona tiene sus propias causas y/o factores de riesgo. Además de un enfoque interdisciplinar, en el que diferentes profesionales deben decidir lo mejor para la persona” añade el doctor David Curto.

En la evaluación de riesgos de caída se tienen en cuenta factores como haber sufrido caídas previas, trastornos de la marcha o el equilibrio, el estado de nutrición e hidratación, la medicación así como el estado del hogar. Es importante también abordar cuadros clínicos específicos y enfermedades crónicas frecuentes en esta edad como depresión, diabetes, osteoporosis o artrosis. En base a la valoración de riesgos, tres son las principales líneas de prevención:

Programa de actividad física que trabaje la resistencia aeróbica; la flexibilidad; el equilibrio, la fuerza o la potencia muscular. “Caminar, pedalear o incluso ejercicios de la vida diaria como levantarse, agacharse o subir y bajar escaleras mejoran la resistencia aeróbica. Los estiramientos, el yoga y el pilates son buenos para trabajar la flexibilidad y el equilibrio” recomienda el doctor David Curto.

Ajuste de la medicación tanto para revisar la polimedicación o consumo de cinco o más fármacos al día así como para corregir posibles prescripciones inadecuadas. “La polifarmacia y el nivel de prescripción inadecauda, que también es elevado a esta edad, son dos factores de riesgo. Por ejemplo, pasar de cinco a cuatro medicamentos, siempre que se pueda, o ajustar determinados tipos, como los antihistamínicos, contribuye a disminuir el riesgo” explica el doctor David Curto.

Revisión del hogar para modificar cualquier riesgo “ya que más del 50% y hasta el 70% de las caídas se produce en casa”. Factor de especial importancia en personas con alto riesgo de caída o deterioro visual.

26 de noviembre de 2015

El frío aumenta el riesgo de enfermar entre las personas mayores de 65 años

Salud y bienestar
  • Problemas cardiovasculares, respiratorios y reumatológicos son los más comunes asociados al frío
  • Las personas con depresión también son más sensibles al invierno debido al cambio de temperatura, el menor número de horas de luz o la mayor nubosidad
  • El envejecimiento altera la capacidad para percibir la temperatura, por lo que la adaptación es más difícil

Los mayores de 65 años es uno de los grupos de población más vulnerable a la bajada de temperaturas que anticipa la llegada del invierno. Momento de tomar precauciones que prevengan y/o neutralicen el mayor riesgo de enfermar asociado al frío.

La mayor vulnerabilidad de los mayores se explica por un déficit de adaptación a las temperaturas extremas, especialmente al frío. En palabras del doctor David Curto, jefe de Gestión Asistencial de Sanitas Residencial “el envejecimiento del organismo altera el metabolismo basal y, como consecuencia, el sistema de termorregulación corporal y su capacidad para percibir la temperatura ambiente. Por eso los mayores tienen mayor dificultad de adaptación al frío o el calor”.

Además, a medida que disminuye la temperatura ambiental aumenta el riesgo de enfermar. Problemas cardiovasculares, respiratorios y reumatológicos son los cuadros más comunes asociados al frío. “Cuando baja la temperatura, el organismo reacciona perdiendo calor y los vasos sanguíneos se contraen. Esto obliga al corazón a bombear más sangre y se produce un aumento de la presión arterial o hipertensión que eleva el riesgo de sufrir un accidente cardiovascular” explica el doctor Curto.

En cuanto a problemas respiratorios, el frío disminuye las defensas y hace que las mucosas no funcionen igual, lo que favorece los resfriados, gripes o infecciones respiratorias o bronquitis. Aquellos que padecen enfermedades reumatológicas, como la artrosis o la artritis, pueden ver aumentar sus síntomas. Las personas con depresión u otras enfermedades psiquiátricas son también más sensibles al invierno sobretodo por el cambio de temperatura, la mayor nubosidad o el menor número de horas de luz.

Por otra parte, hay que tener en cuenta que algunas patologías propias de las personas mayores, como la artritis, la enfermedad de Parkinson y otras que afectan a su capacidad de movimiento pueden plantearles serios problemas a la hora de ponerse ropa de abrigo e incluso a protegerse del frío en lugares más calientes. Asimismo, otras enfermedades, como la diabetes o el hipotiroidismo favorecen el hecho de que el cuerpo no pueda mantenerse caliente, aumentando la sensación de frío.

Protegerse del frío para proteger la salud
Para proteger la salud de los efectos del frío, se pueden seguir las siguientes recomendaciones:
– No automedicarse
– Evitar los cambios bruscos de temperatura
– Limitar las actividades exteriores
– Tapar la nariz y boca al toser o estornudar
– Respirar por la nariz y no por la boca
– Aumentar la frecuencia del lavado de manos
– Incrementar el aporte calórico de las comidas y utilizar preparados en caliente
– Regular el sistema de calefacción (temperatura de 20-22 ºC)
– Utilizar las prendas de abrigo adaptadas a la temperatura ambientetento en interiores como en el exterior

En el caso concreto de la gripe estacional, los expertos recomiendan la vacunación en mayores de 60 años.

19 de noviembre de 2015

Las nuevas tecnologías mejoran la calidad de vida de los mayores

Transformación digital
  • Las TIC son una herramienta muy efectiva a la hora de combatir la discapacidad y la dependencia
  • Potencian tanto los estímulos cognitivos como las capacidades residuales y la autoestima
  • Favorecen el envejecimiento activo y en la prevención de la demencia

Las nuevas tecnologías forman parte de la vida diaria de la mayor parte de la población y, con el tiempo, se han integrado en la de las personas mayores. Desde el punto de vista asistencial, los centros de Sanitas Residencial fomentan su uso para aprovechar su potencial sobre la salud y el bienestar de los usuarios.

Las nuevas tecnologías ofrecen una gran cantidad de posibilidades aplicadas a la vida diaria, que comprenden ámbitos comunes como el ocio o el entretenimiento e incluso otros más funcionales o técnicos como son las labores profesionales. Sin embargo, estas funciones que resultan comunes para la mayoría de la población, encuentran una utilidad destacable en la mejora de la calidad de vida de los mayores.

El Dr. David Curto, jefe de Gestión Asistencial de Sanitas Residencial, afirma que este tipo de actividades tienen una repercusión positiva en los mayores y sus efectos son notables. “Tanto para las personas que se encuentran en un avanzado estado de deterioro cognitivo, como para las que están en una fase temprana, las actividades audiovisuales presentadas en las plataformas digitales se emplean con el fin de rehabilitar funciones alteradas en los diferentes ámbitos y, en segunda instancia, estimulan las capacidades residuales y la autoestima».

La adaptación de estos talleres a las necesidades de cada persona permite que estas puedan ejercitarse a diferentes niveles, como el cognitivo, el motriz, el equilibrio, la propiocepción e incluso en el ámbito de las actividades de la vida diaria. “Lo importante son las actividades que se trabajan y los beneficios que se buscan, independientemente de las soluciones tecnológicas, ya que se adaptan a las limitaciones de cada uno” apunta David Curto.

La mejora de la calidad de vida de los mayores por medio de las nuevas tecnologías es aplicable a muchos aspectos, especialmente si se realizan en grupo, donde se trabajan habilidades y características sociales como la interacción. En el aspecto físico, se pueden trabajar factores como el equilibrio, la coordinación, la movilidad e incluso la fuerza y en lo referido a otros aspectos se pueden trabajar las relaciones interpersonales, la atención, la concentración, la memoria y la discriminación visual entre otras.

La acogida por parte de los mayores es muy positiva e incluso en algunos casos la interacción ha llegado superar la brecha generacional que ha abierto la rápida evolución de las tecnologías de la información. Es el caso de M.P., residente de uno de los centros de Sanitas Residencial que cuenta como “a diario lee toda la prensa desde el iPad, de hecho lo prefiere a llevar a cabo la lectura en papel. También ve películas y consulta cualquier tipo de información”. Un hábito que resulta complejo para la mayoría de personas de edad avanzada ya que este tipo de dispositivos implican elementos como la navegación táctil.

Envejecimiento activo
El uso de las nuevas tecnologías o su aplicación en tratamientos también favorece un envejecimiento activo. Es el caso de actividades orientadas al estímulo cognitivo que logran ralentizar el proceso degenerativo. “La estimulación neuronal mediante estas acciones favorece la interconexión entre estas, hecho que repercute de forma positiva en el proceso de envejecimiento activo” concluye David Curto.

13 de noviembre de 2015

“Estimular las emociones positivas mejora la calidad de vida de los mayores”

Salud y bienestar
  • El Centro de Día Sarrià celebra su 5º aniversario con ponencias sobre la calidad asistencial y la atención profesional a mayores
  • Más de 150 familias han confiado en los cuidados del Centro desde su apertura en 2010

La capacidad para mantenerse optimista protege la salud física de los mayores y favorece un envejecimiento activo. Así lo afirmó Iñaki Ferrando, director de Comunicación Médica de Sanitas, durante su ponencia “Psicología positiva en el día a día de la gente mayor” en el marco del quinto aniversario del Centro de Día Sarrià.

El Centro de Día Sarrià cumple cinco años desde su apertura, tiempo en el que ha trabajado por ofrecer la mejor atención a los mayores y sus familias bajo “las premisas de calidad asistencial, promoción de un envejecimiento activo y máxima flexibilidad” afirmó Bruno Sanllehí Colom, gerente del Centro.

Desde que abriera sus puertas en 2010, más de 150 familias han comprobado los beneficios de contar con una asistencia profesional que plantea un abordaje integral y multidisciplinar de las dimensiones física, cognitiva y social del mayor. Para ello, el Centro estructura su programación en las áreas de rehabilitación, estimulación cognitiva, psico – motricidad, trabajo en grupo – sociabilidad y control de la nutrición y medicación. En cada uno de estos cinco ámbitos, ha ido incorporando las últimas tendencias y avances en atención gerontológica, hasta llegar a la actualidad con una oferta asistencial diferencial, altamente especializada y de primer nivel.

A través de las sesiones de psicomotricidad trabaja aspectos como el mantenimiento y el incremento de la flexibilidad, la fuerza, el desarrollo del equilibrio, los reflejos y la coordinación para reducir al mínimo el riesgo de caídas y garantizar un correcto estado de bienestar psicofísico. En este ámbito, los mayores cuentan con talleres de fisioterapia de rehabilitación, osteopatía, pilates, fuerza y entrenamiento muscular, gimnasia de mantenimiento, aquagym o gerontogimnasia.

Para promocionar una vida activa que mantenga o mejore las capacidades cognitivas existentes, el Centro ofrece talleres de logopedia, rehabilitación neuropsicológica individual, psicología positiva, memoria, relajación, estimulación cognitiva grupal o apoyo familiar. Asimismo, cuenta con distintas dinámicas para todo lo relacionado con la sociabilidad, el trabajo en equipo y el compañerismo, con el objetivo de mejorar la calidad de vida y potenciar la autonomía de los mayores.

“Detrás de este gran proyecto hay un gran equipo profesional y humano, valor diferencial del Centro de Día Sarrià que hoy cumple cinco años con un balance muy positivo gracias, sobre todo, a la gran vocación de los profesionales del Centro” declaró Domènec Crosas, director general de Sanitas Residencial. Junto al equipo directivo, el Centro cuenta con tres fisioterapeutas, doctora, enfermera, terapeuta ocupacional, dos psicológas, chófer para los desplazamientos de usuarios,15 auxiliares y un perfil de trabajador social.

Una actitud positiva para una mejor salud
El Centro de Día Sarrià quiso celebrar su quinto aniversario con las ponencias de expertos de reconocida trayectoria en la atención a mayores. Entre ellos, el doctor Iñaki Ferrando, Director de Comunicación Médica de Sanitas, quiso dedicar su intervención a la importancia de la “Psicología Positiva en el día a día de la gente mayor”.

“Si día a día enseñamos a nuestros mayores a ver el vaso medio lleno, a ser optimismas y ver las limitaciones propias de la edad con un prisma positivo, estaremos contribuyendo a mantener o mejorar su estado físico y psicológico” explicó Iñaki Ferrando. “Igualmente estimular emociones y pensamientos positivos puede tener efectos preventivos, con retraso de síntomas en determinadas dolencias, e incluso, curativos, en los que vemos cómo el estado físico o ánimo de la persona experimenta una mejoría”

Por su parte, el doctor David Curto, jefe de Gestión Asistencial de Sanitas Residencial, habló sobre “El impacto de la asistencia profesional en la salud de los mayores” en referencia a la necesidad de cumplir unos requisitos de calidad con acciones e indicadores concretos que permitan medir y cuantificar el impacto positivo en la salud. “Es muy importante tener en cuenta los costes de la no calidad y, sobretodo, como una asistencia profesional deficitaria repercute al final negativamente en la salud de la gente” concluyó David Curto.

10 de noviembre de 2015

Más de 650.000 personas sensibilizadas sobre los problemas del alzhéimer

Comunidad
  • La iniciativa suma más de 300 recuerdos de usuarios de Twitter y Facebook con sus abuelos
  • El objetivo es que el alzhéimer no caiga en el olvido y que la conciencia sobre esta enfermedad crezca por medio de historias cercanas y testimonios reales

El alzhéimer es la demencia más prevalente en el mundo en la actualidad y se estima que solamente en España hay 800.000 personas que lo padecen. Una cifra que no para de crecer y que, según las estimaciones, puede duplicarse en los próximos veinte años.

Para sensibilizar a la sociedad sobre esta realidad, Sanitas Residencial ha desarrollado diversas iniciativas de carácter social. La más reciente es “Recordando juntos”, una acción en la que se invitó a usuarios de Facebook y Twitter a compartir momentos, recuerdos e imágenes con sus mayores. El objetivo es que el alzhéimer no caiga en el olvido y que la conciencia sobre esta enfermedad crezca por medio de historias cercanas y testimonios reales.

Hasta el momento, más de 650.000 usuarios de Twitter y Facebook han visitado los más de 300 recuerdos y el centenar de fotos compartidas por los usuarios de ambas redes sociales con sus abuelos. Además, la iniciativa ha tenido un gran impacto y ha generado más de 9.700 interacciones en ambas redes sociales.

“Las redes sociales se han convertido en una herramienta cada vez más útil para las personas con alzhéimer, familiares y cuidadores, donde encontrar información, buscar consejos, compartir experiencias y no sentirse solos. Si a esto añadimos su potencial para sensibilizar y difundir causas sociales, creímos que era un buen canal para sensibilizar a la sociedad sobre los problemas de esta enfermedad”, explica el Dr. David Curto, jefe de Gestión Asistencial de Sanitas Residencial.

En esta línea, la Fundación Sanitas ha puesto en marcha el proyecto cuidarbien.es. Se trata del primer portal centrado en el cuidador de personas con demencia donde los familiares de personas con alzhéimer tienen acceso a toda la información, consejos y herramientas útiles sobre cómo cuidar de su salud, entender mejor el alzhéimer y otras demencias y lo que supone el cuidado de quien lo padece, de manos de los expertos de Sanitas.

La demencia afecta a casi 47 millones de personas en todo el mundo
Según el Informe Mundial sobre la Demencia 2015: ‘El Impacto Global de la Demencia: Un análisis sobre prevalencia, incidencia, coste y tendencias, elaborado por la Alzheimer`s Disease International (ADI), con el apoyo de Bupa -matriz internacional de Sanitas-, en la actualidad alrededor de 46,8 millones de personas en el mundo viven con demencia, y se estima que los números casi se duplicarán cada 20 años, y alcanzarán los 74,7 millones en 2030 y los 131,5 millones en 2050. Actualmente, hay más de 9,9 millones de nuevos casos de demencia cada año en el mundo, lo que supone un nuevo caso cada 3,2 segundos.