- Cada tres segundos una persona en el mundo desarrolla demencia. El riesgo de padecer alzhéimer se dobla cada cinco años tras cumplir los 65
- Según Andrew Ketteringham, de Alzheimer’s Disease International (ADI), federación internacional de asociaciones de Alzheimer en el mundo, son necesarios planes nacionales de demencia para hacer frente al desafío que supone esta enfermedad
- Las nuevas tecnologías permiten la mejora en los cuidados, facilitan la reminiscencia o la rehabilitación física y cognitiva, y permiten la detección y tratamiento del deterioro
- La relación entre las demencias y la ausencia de actividad física, la necesidad de abordar el diagnóstico del alzhéimer desde edades más tempranas o el abordaje de su estudio desde la colaboración entre distintos campos son algunos de los temas destacados en la mesa de tendencias médicas
En España, uno de cada cuatro hogares españoles se ve afectado por el alzhéimer, según datos de la Fundación Sanitas. En total, más de 1,2 millones de personas en España viven con esta enfermedad. En este escenario, Sanitas ha celebrado una jornada que apuesta por continuar innovando en demencia para mejorar la calidad de vida de las personas que viven con alzhéimer y también para explorar nuevos tratamientos y métodos diagnósticos.
Ha inaugurado la jornada Iñaki Ereño, consejero delegado de Sanitas, que ha destacado el compromiso de Sanitas con el cuidado de las personas que viven con demencia desde el abordaje de la persona es lo primero. Es decir, “poner el foco en las necesidades de la persona y no en la enfermedad”. En este sentido, Sanitas apuesta por el cuidado sin sujeciones, hoy el 89% de los centros de la red de la compañía están acreditados como libres de sujeciones, “menos de un 1% de nuestros residentes usan sujeciones frente a la media española, que se sitúa en más del 20%”, ha comentado Iñaki Ereño.
Andrew Ketteringham, tesorero de la Alzheimer’s Disease International (ADI, por sus siglas en inglés) ha puesto en relieve la situación de esta enfermedad a nivel mundial, según datos de la organización, cada tres segundos, una persona en el mundo desarrolla demencia. En términos económicos, en 2018 supone un coste de un billón de dólares en todo el mundo y subirá a dos billones en 2030. “Es muy importante que se desarrollen planes nacionales contra esta enfermedad. La demencia debe ser una prioridad de salud pública. En la actualidad, 32 países tienen vigentes planes gubernamentales y 16, entre los que se encuentra España, los van a instaurar en 2018. El objetivo que perseguimos es que 146 países tengan aplicadas en 2025 políticas nacionales contra esta enfermedad, es decir el 75% de los países miembros”, explica Andrew Ketteringham, tesorero de ADI.
Soluciones digitales para los cuidados
La jornada ha contado con la presencia de Yuri Quintana, PhD de Harvard Medical School, quien ha hablado de su papel en la creación de soluciones tecnológicas de digitales para mejorar la calidad de vida de quienes viven con demencia y sus cuidadores. “En Boston hemos desarrollado una aplicación para mayores con InfoSAGE (Information Sharing Across Generations) que se integra en los altavoces inteligentes y la inteligencia artificial de Amazon Alexa. Esta permite que las familias se involucren en mayor medida en los tratamientos, respetando la independencia de la persona con demencia”, ha afirmado Quintana.
Sobre este punto, Yuri Quintana ha subrayado la necesidad de dar cierto espacio a las personas mayores. Los pacientes manifiestan que quieren contar con el cuidado de su familia, pero también mantener el control sobre las decisiones sobre su cuidado.
Juan Monzón, cofundador y consejero delegado de Exovite, empresa dedicada a la investigación en el ámbito de la TeleRHB, eHealth y mHealth, ha puesto de manifiesto “cómo la realidad virtual, entre otras tecnologías, ayuda a trabajar la reminiscencia al traer de vuelta recuerdos positivos gracias a la creación de bancos de recuerdos personalizados. De esta manera, propone algunas soluciones como las visitas virtuales de Google Street View o vídeos 360 para facilitar al paciente el proceso de reminiscencia o búsqueda de sus recuerdos”.
Por su parte, Pablo Gagliardo, director de Desarrollo de Negocio de Rehametrics, un software de rehabilitación para tratar lesiones físicas y cognitivas por daño cerebral, enfermedades neurodegenerativas y envejecimiento, ha explicado cómo la rehabilitación virtual ayuda al paciente. “Trabajamos la motivación a través de técnicas de gamificación, no solo en un entorno clínico sino en cualquier entorno asistencial, por supuesto, también en el propio hogar del paciente. Así conseguimos que se complete la totalidad del plan de tratamiento pautado por el profesional de una forma ágil”, afirma Gagliardo.
Javier Mínguez es co-fundador de Bitbrain Technologies, una empresa aragonesa que nació como spin-off de la Universidad de Zaragoza. Durante la comparecencia ha destacado cómo la neurotecnología puede ser parte importante en detección y tratamiento del deterioro cognitivo. “A través de las nuevas soluciones podemos saber si las sesiones de rehabilitación van a tener resultado o si el paciente ha alcanzado el límite de saturación”.
Nuevas tendencias en innovación médica
La segunda mesa de la jornada ha versado sobre innovación médica. María José Gil, del servicio de Neurología del Hospital Universitario de Torrejón ha explicado cómo “el riesgo de padecer alzhéimer se dobla cada cinco años tras cumplir los 65”. Ha advertido también sobre algunos de los factores de riesgo relacionados con el alzhéimer, como las enfermedades cardiovasculares. La doctora ha incidido en la importancia de “prevenir el deterioro cognitivo incluso en edades muy tempranas. Además es importante hacer estudios en pacientes asintomáticos, en torno a los 45 años, porque la enfermedad aparece mucho antes que los síntomas”.
Carmen Terrón, del servicio de Neurología del Hospital Universitario Sanitas La Zarzuela, ha expuesto la relación entre la ausencia de actividad física y el deterioro cognitivo. “En España, un tercio de la población no realiza actividad física y este es el factor de riesgo más potente de desarrollo de alzhéimer en nuestro entorno”. Según la doctora, “los ancianos, de entre 70 y 80 años, que se han mantenido físicamente activos en los cinco años previos podrían tener un 40% menos de posibilidades de desarrollar alzhéimer”.
Mª Ascensión Zea Sevilla, del Área Neurología de la Fundación CIEN, ha centrado su exposición en los marcadores para el diagnóstico precoz de enfermedades neurodegenerativas. “El alzhéimer está asociado al riesgo cardiovascular y se manifiesta 15 años antes de que aparezcan los primeros síntomas”. A través del Proyecto Vallecas, desde la Fundación CIEN realizan un estudio para definir un método de diagnóstico precoz de la enfermedad a mayores de 70 años.
David A. Pérez Martínez, jefe del servicio de Neurología del Hospital Universitario 12 de Octubre, ha comentado el mejor abordaje del tratamiento de la enfermedad desde el ámbito hospitalario en colaboración con otras instituciones. Ha recordado que “es necesario implementar un sistema bien codificado para interpretar bien los casos de los pacientes y medir los resultados porque potenciará la investigación”. El doctor ha comentado que “la accesibilidad al sistema y a las consultas es fundamental” para obtener los datos necesarios.
Ha cerrado la jornada Domènec Crosas, director general de Sanitas Mayores, que ha puesto el foco en el compromiso de Sanitas y de Bupa, su grupo matriz, en la creación de sociedades inclusivas con las personas que viven con demencia. “Tenemos la obligación de mirar al futuro y de apostar por la innovación, pero también de dar respuesta a las necesidades de las personas que hoy viven con demencia y sus familias”, ha afirmado Crosas. “Estamos en una era en la que las oportunidades de la tecnología en el cuidado y la atención a las personas son mayores que nunca. Seamos valientes, seamos abiertos, y aprovechémoslo”, ha concluido Domènec Crosas.