- Actualmente, solamente el 1,3% de los mayores de Sanitas Residencial utiliza sujeciones frente a la media española que se sitúa en el 20%
- Sanitas es la primera organización con más del 65% de sus residencias certificadas como centros libres de sujeciones en España
El centro Sanitas Residencial Más Camarena ha sido acreditado como “Centro Libre de Sujeciones” por la Confederación Española de Organizaciones de Mayores, CEOMA. Gracias al proyecto ‘Por una residencia sin sujeciones’, los mayores de Sanitas Residencial Mas Camarena reciben, no sólo una atención personalizada, sino también libre de sujeciones.
Kety Amérigo, directora de Sanitas Residencial Mas Camarena, ha recibido la acreditación de manos del vocal de CEOMA y presidente de la Federación de Organización de Mayores de la Comunidad Valenciana, Rafael Baixauli, en un acto en el que también estuvo presente Pedro Sánchez Soro, director de Operaciones y Centros de Sanitas Residencial.
Esta acreditación supone un reconocimiento al proyecto ‘Por una residencia sin sujeciones’ que puso en marcha en 2012 Sanitas Residencial Mas Camarena con el objetivo de eliminar el uso de las sujeciones y cambiar la filosofía de cuidados de la residencia.
Las instalaciones del centro cuentan con más de 5.900 m2 de última generación e incorporan todos los avances tecnológicos y asistenciales, parking para visitas y jardín privado para disfrute de los residentes. Además, la residencia cuenta con su propio servicio de animación sociocultural, rehabilitación y fisioterapia, peluquería, lavandería, así como un departamento de trabajo social, entre otros.
Para Katy Amérigo, directora del centro, “el logro de esta acreditación significa también un reconocimiento a la mejora de la calidad asistencial de los residentes de Sanitas Residencial”, y ha destacado que “en la actualidad, nuestra compañía es la primera organización de España que cuenta con 29 residencias libres de sujeciones, donde sólo un 1,3% de nuestros residentes utiliza sujeciones físicas, frente a la media española que se sitúa en el 20% según la Asociación de Empresas de Servicios para la Dependencia (AESTE), que engloba a los principales operadores del sector residencial”.
Por su parte, Pedro Sánchez Soro, director de Operaciones y Centros de Sanitas Residencial, ha explicado que “la demencia es uno de los grandes retos a los que se enfrenta nuestra sociedad, tanto desde el punto de vista médico como desde el punto de vista social”, y ha destacado la especialización de Sanitas Residencial en el cuidado de las personas que sufren algún tipo de demencia.
Por otro lado, el vocal de CEOMA, Rafael Baixauli, ha destacado que entre los objetivos de CEOMA están mejorar la calidad de vida y dotar de visibilidad a los mayores, ya que no hay personas más desprotegidas, vulnerables e invisibles qué miles de ancianos afectados por distintas demencias. Baixauli ha incidido en que “el uso de sujeciones se opone a los principales objetivos de los cuidados prolongados que deben tender a lograr el máximo grado de independencia, capacidad funcional y calidad de vida posible. Es muy importante concienciar a la sociedad de que es posible vivir sin sujeciones, incluso, en el ámbito residencial”.
Sanitas Residencial apuesta “Por una residencia sin sujeciones”
Sanitas Residencial inició a principios de 2011 el programa de racionalización y eliminación de sujeciones en todos sus centros “Por una residencia sin sujeciones”. Se trata de un proyecto con el que se preserva la dignidad y se protege la integridad de los residentes ofreciéndoles los mejores servicios y cuidados a lo largo de las diferentes fases de su vida.
El uso de las sujeciones en su momento pretendía prevenir situaciones de riesgo en determinados tipos de pacientes. Sin embargo, con el paso del tiempo se ha demostrado que su utilización acarrea algunos problemas y que disminuye la calidad de vida de la persona: aparición de úlceras por presión, incontinencia, trastornos conductuales, inmovilidad, atrofia muscular, etc.
Para Sanitas Residencial, las sujeciones no son una alternativa terapéutica. Por ello, se puso en marcha este programa que tiene como objetivo eliminar a medio plazo las sujeciones en todos los centros de Sanitas Residencial.
El método de trabajo establecido por Sanitas incluye formación para todo el personal y un plan de acciones multidisciplinar. En primer lugar, se realiza es un análisis exhaustivo de la situación de cada persona porque la diversidad de los casos requiere de una planificación previa para determinar qué consecuencias ha tenido el uso de sujeciones y cuáles serán los efectos de su eliminación.
Una vez que se han retirado las sujeciones, se lleva a cabo un seguimiento para evaluar si la persona necesita ayudas adicionales como fisioterapia personalizada, terapias no farmacológicas, retirada de la medicación neuroléptica o la adquisición de recursos técnicos como sensores de movimiento o caídas.
El proyecto “Por una residencia sin sujeciones” ha demostrado que obteniendo todos los beneficios de la eliminación de las sujeciones, no ha aumentado el número de caídas que sufren los residentes y se mantienen en la cifra de aquellas que tienen consecuencias más graves, como fracturas o traumatismos cráneo-encefálicos. Incluso, se ha comprobado que en los centros sin sujeciones se respira un ambiente calmado, apacible, donde tanto residentes como trabajadores se sienten cómodos. Un cambio de cultura que incluye la personalización de la atención al residente.
En el programa ha participado todo el personal de Sanitas Residencial, desde los cuidadores y técnicos hasta la dirección de los centros, y se ha contado con el apoyo de las familias que han sido puntualmente informadas sobre las claves del proyecto y las distintas fases del mismo.