- El convenio de colaboración espera aplicar el conocimiento generado por la cátedra a centros sanitarios para convertirlos en espacios más sostenibles y saludables
La Universidad de Navarra, a través del Instituto de Biodiversidad y Medioambiente (BIOMA), y Sanitas impulsan una nueva cátedra para potenciar la investigación y formación en torno a la relación que existe entre la salud de las personas y el medio ambiente, alineada con el concepto One Health (una única salud) que promueven, entre otros, la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Paloma Grau, vicerrectora de Investigación y Sostenibilidad de la Universidad; y el CEO de Sanitas y Bupa ELA, Iñaki Peralta, han firmado el convenio de colaboración que persigue, además, fomentar la divulgación científica a través de proyectos, conferencias, publicaciones y otras actividades, para concienciar a la sociedad de la necesidad de incorporar modelos de desarrollo sostenible para cuidar el entorno en el que vivimos y su influencia directa sobre la salud de las personas.
Entre los objetivos de la cátedra, que se llamará “Cátedra Sanitas de Salud y Medio Ambiente” están: generar investigación y conocimiento sobre la relación entre la salud y el medioambiente; formar a las nuevas generaciones sobre este concepto; difundir, comunicar y recomendar públicamente que se dé mayor visibilidad a la relación entre la salud humana y la salud de los ecosistemas e incorporar los conocimientos generados por la cátedra en la transformación del sector sanitario y otros entornos.
La financiación de Sanitas de la cátedra se destinará a sufragar los proyectos de investigación y las actividades de divulgación impulsadas por los investigadores de la Universidad de Navarra. El convenio de colaboración tiene una vigencia de tres años. La cátedra estará dirigida por Jesús Miguel Santamaría, director del Instituto de Biodiversidad y Medioambiente de la Universidad de Navarra.
“La Universidad de Navarra promueve una investigación científica rigurosa, multidisciplinar y aplicada, al servicio de la innovación de las empresas, especialmente ahora que nos encontramos ante importantes desafíos”, ha destacado Jesús Miguel Santamaría, director del Instituto BIOMA. “Esta nueva cátedra contribuirá sin duda a mejorar el cuidado de las personas y del entorno, a la divulgación del conocimiento y a generar la sensibilización necesaria para que, juntos, prosperemos como sociedad, estableciendo un vínculo entre salud y naturaleza”.
Por su parte, el CEO de Sanitas y Bupa ELA, Iñaki Peralta, ha comentado: “queremos aportar evidencias científicas sobre la vinculación entre la salud de las personas y los entornos saludables. Nuestra idea es aplicar ese conocimiento en nuestros centros para convertirlos en espacios más saludables y extender ese conocimiento al resto del sector. Se trata de incorporar criterios de diseño sostenible y positivo para la salud, seleccionando las mejores soluciones arquitectónicas, de equipamiento y biofílicas para las personas que residen cerca, visitan o trabajan en los centros de Sanitas. Todo ello a la vez que trabajamos para hacer que nuestras instalaciones tengan cero emisiones netas de CO2 y generen, por tanto, un menor impacto para el planeta”.
Entre las primeras acciones de la cátedra está la elaboración de una guía con evidencias acerca del impacto en España del cambio climático y la contaminación sobre la salud de las personas. Esta evidencia será acompañada de recomendaciones para mitigar la contribución de los edificios a este fenómeno hasta transformarlos en espacios saludables, con especial foco en los centros sanitarios.
Por otro lado, se propone desarrollar un innovador modelo de pruebas para testear los hallazgos generados por las líneas de investigación de la cátedra. Se realizará a través de un gemelo digital que permitirá simular distintos escenarios para determinar el éxito de la aplicación de medidas que mejoren los resultados de salud, la experiencia del paciente y el impacto sobre el entorno en el que se ubica el centro. La realización del gemelo digital se llevará a cabo gracias a la obtención de una cantidad masiva de datos generados mediante el despliegue de una red de sensores (temperatura, humedad, material particulado y gases contaminantes) que monitorizarán en tiempo real las estancias interiores y el exterior del hospital que se tome como modelo.