- La demencia es uno de los grandes retos globales de salud con 46,8 millones de afectados en el mundo
- Un 94% de las personas con demencia en países con ingresos bajos y medios recibe cuidados en su propio domicilio
- Un envejecimiento activo y saludable previene la demencia e incrementa la calidad de vida de las personas afectadas
- El 50% de los cuidadores de personas con demencia pueden sufrir alteraciones físicas, psíquicas y sociales, según los datos preliminares del estudio “El cuidador en España” elaborado por CEAFA y la Fundación Sanitas
En 2030 podremos alcanzar una sociedad comprometida con el gran reto global de la demencia a través de una atención sanitaria centrada en las personas. Esta es una de las principales conclusiones extraidas de la jornada “Comprometidos con la demencia” organizada por la Universidad Pompeu Fabra (UPF) y Sanitas.
El encuentro, celebrado hoy en la sede de la UPF Barcelona School of Management en Barcelona, ha contado con la participación de expertos internacionales como Graham Stokes, director global de Demencia de Bupa, matriz de Sanitas; así como de reconocidas asociaciones e instituciones como la Confederación Española de Organizaciones de Mayores, CEOMA; la Confederación Española de Asociaciones de Familiares de Personas con Alzheimer, CEAFA; Alzheimer Cataluña; la Universidad Ramón Llull; la Fundación Salud y Envejecimiento UAB; y la Fundación Maria Wolf.
Graham Stokes ha incidido en el complejo escenario que plantea la demencia para la sociedad en la actualidad y en el futuro. En este momento, en el mundo hay 46,8 millones de personas que padecen demencia y se estima que esta cifra casi se triplicará para el año 2050. En España cerca de 1,2 millones personas tienen Alzheimer. Cifra que también crecerá exponencialmente en los próximos años. Esto supone “un incremento dramático de la prevalencia cuyo impacto es aún mayor en países con ingresos bajos y medios donde la familia asume el cuidado del 94% de las personas con demencia” ha afirmado Stokes.
Pese a este panorama, el experto británico ha lanzado un mensaje positivo con “2016 como un momento de grandes oportunidades para cambiar la narrativa a través del fomento de la responsabilidad personal y civil. Personal para ser conscientes de los riesgos y reducir el potencial número de personas afectadas en el futuro. Civil para que todos seamos dueños de la demencia y permitamos vivir mejor a la personas que la padecen” ha explicado. En este sentido, se ha referido a experiencias destacadas a nivel internacional como las estrategias llevadas a cabo en Reino Unido y Japón gracias a las que se ha conseguido una gran implicación social con uno y cuatro millones, respectivamente, de “Dementia Friends”.
Estas experiencias ejemplifican cómo el reto de la demencia, por sus profundas consecuencias sociales y económicas, necesita la respuesta de todos los agentes implicados: organismos públicos, instituciones, empresas, investigadores, profesionales sanitarios, afectados y familiares y, en general, de todos los ciudadanos.
Familia, principal proveedor de cuidados de la demencia
Entre estos agentes, la familia es clave en el abordaje de la enfermedad. “El cuidado familiar es, hoy por hoy, el mejor aliado que tiene nuestra sociedad para intentar hacer frente a los devastadores efectos de la enfermedad, y lo seguirá siendo en el futuro complementando, y supliendo muchas veces, los esfuerzos inversores de los sistemas sanitarios y sociales hoy disponibles” ha comentado Cheles Cantabrana, presidenta de CEAFA. Una afirmación que corroboran los datos preliminares presentados durante la jornada del estudio “El Cuidador en España” elaborado por la Confederación y la Fundación Sanitas.
El informe señala que uno de cada cuatro hogares en España se ve afectado por un familiar con Alzheimer, por lo que el cuidador familiar debe ser objeto de atención preferente en las políticas de protección que, de manera específica, han de dictarse para afrontar el problema sociosanitario que representa el Alzheimer. “Todos los miembros de la unidad familiar participan de la enfermedad en sus diferentes fases de evolución. Esa participación en la enfermedad genera en ellos predisposición a padecer alteraciones físicas, psicológicas y sociales. De acuerdo con las previsiones de CEAFA y Sanitas, cerca de dos millones de cuidadores, el 50%, pueden sufrir estos efectos.
Otro de los informes presentados en la jornada ha sido el estudio “Retirada de Sujeciones” elaborado por la Fundación María Wolf junto a Sanitas. Las conclusiones de la investigación, realizada en 41 hogares españoles a lo largo de tres años, arroja positivas conclusiones sobre los beneficios, tanto físicos como psicológicos, que sobre el mayor tiene la implementación de un cuidado libre de sujeciones. “La reducción de ataduras y la disminución de fármacos sedantes redunda en el bienestar del mayor. Para desarrollar esta estrategia es esencial la formación a todos los niveles de la organización” ha explicado Rubén Muñiz, presidente de la Fundación Maria Wolf.
¿Se puede prevenir la demencia?
Dado que no se conocen las causas de la enfermedad, en el ámbito de la prevención la opción está en concienciar hacia la reducción de los factores de riesgo que se asocian a la prevención de las demencias. Así el fomento de un envejeceimiento activo y saludable puede contribuir a prevenir y también a mejorar la calidad de vida de las personas con demencia. Cuidar el corazón, practicar actividad física, seguir una dieta saludable, activar el cerebro y disfrutar de la vida social son algunos de los consejos para reducir el riesgo.
Campaña de sensibilización
La jornada se enmarca en el compromiso global de Sanitas y Bupa en la lucha contra la demencia. Dentro del mismo, la compañía ha puesto en marcha la campaña de sensibilización “Comprometidos con la demencia”, cuyo objetivo es sensibilizar y formar a los empelados, clientes corporativos, administraciones públicas, colegios, asociaciones civiles y la sociedad sobre qué es la demencia y conseguir un compromiso activo.
A través de www.compromisodemencia.com se ofrece una completa información sobre la enfermadad, cuánto se sabe sobre ella y sus efectos en el cerebro, aprender cómo lafecta de diferente manera a las personas y técnicas para reducir el riesgo de padecerla en el futuro. Además, la web ofrece cuatro maneras de comprometerse: ayudar a alguien con demenecia del entorno; ser un defensor; colaborar con organizaciones de personas mayores; y ofrecerse voluntario en los centros residenciales de Sanitas.